Los tejanos aman sus autos y camionetas, pero continúan llegando datos de que se ha vuelto cada vez más peligroso conducir y ser peatón aquí en el Estado de la Estrella Solitaria. Según el Departamento de Transporte de Texas (TxDOT), peatones se encuentran entre los usuarios viales más vulnerables. Tanto es así que los peatones ahora constituyen el 20% de todas las muertes por accidentes de tránsito. El estado tuvo 669 muertes de peatones en 2019, el año más reciente con datos finales, y hubo 5975 accidentes de tránsito que involucraron a peatones. También hubo 1.317 víctimas gravemente heridas.
De acuerdo a Director Ejecutivo de TxDOT:
“De 2015 a 2019, los accidentes de tráfico se cobraron la vida de 3.150 peatones. Para alcanzar nuestra meta de cero muertes en las carreteras de Texas, necesitamos que todos los conductores obedezcan las reglas de tránsito, permanezcan alertas y asuman la responsabilidad de vigilar a los peatones, y que los peatones sigan los consejos de seguridad”.
¿Por qué tantos muertos y heridos?
TxDOT citó algunas razones de los accidentes:
- Los automovilistas no ceden el derecho de paso a los peatones
- Los automovilistas que no siguen las leyes de seguridad vial
- Automovilistas que conducen distraídos
- Automovilistas conduciendo demasiado rápido
- Automovilistas conduciendo bajo la influencia
Hacer las carreteras más seguras es un comienzo
TxDOT también ha invertido $153 millones en dinero estatal y federal para hacer que las carreteras sean más seguras para los peatones que intentan usar los cruces peatonales o las aceras junto a las carreteras. Esto incluye:
- Mejoramiento de aceras
- Actualización de bordillos
- Mejore las líneas en la carretera para alertar a los conductores
- Apoyo a las rutas seguras a las escuelas
- Apoyar caminos de usos múltiples
- Otras actuaciones en entornos urbanos, pueblerinos y rurales
Los conductores deben ser más cuidadosos
Los conductores deben evitar la conducción imprudente y el comportamiento al volante porque están operando equipos peligrosos. Deben obedecer todas las normas de tráfico, mantener la vista en la carretera y tomar otras precauciones sensatas. Las ramificaciones de las acciones imprudentes pueden cambiar la vida de los conductores, peatones y familiares en una fracción de segundo.