Imagínese que su salud o su vida dependan de un dispositivo médico, sólo para terminar hospitalizado porque el dispositivo no funciona como debería. Ese escenario de pesadilla es exactamente lo que les ha sucedido a miles de personas con la bomba de insulina Medtronic MiniMed serie 600.
En teoría, las bombas de insulina mejoran el pronóstico de las personas con diabetes al eliminar el error humano en la administración de insulina. Desafortunadamente, como ha demostrado el reciente retiro del mercado, diseño defectuoso o pruebas inadecuadas significa que el propio dispositivo podría causar errores que pueden ser mucho peores que los errores humanos.
Los dispositivos de Medtronic son parte de un importante retiro del mercado
La serie MiniMed 600 incluye algunas de las bombas de insulina más populares de Medtronic, y esa popularidad significa que más de 322.000 bombas de insulina individuales ayudar a las personas con diabetes tipo 1 son parte del retiro. La recomendación, en este caso, es que las personas con las unidades afectadas inspeccionen la unidad en busca de posibles problemas y se comuniquen con su médico si sospechan un problema o si no pueden analizar adecuadamente la funcionalidad del dispositivo por su cuenta.
Los problemas con el tanque de suministro y el anillo que se usa en el dispositivo podrían hacer que el paciente reciba demasiada insulina o que no reciba la suficiente según sus niveles actuales de azúcar en la sangre. Cualquier falla podría tener graves consecuencias médicas para la persona involucrada.
Cualquiera que incurra en gastos médicos o pierda a un ser querido como resultado de un dispositivo médico defectuoso puede tener la oportunidad de responsabilizar al fabricante o al profesional médico que instaló el dispositivo por sus lesiones y pérdidas.