Un choque estremece y desorienta, pero leer este artículo hoy puede prepararle para saber cómo actuar si tiene la mala suerte de tener que pasar por una situación así.
La realidad es que conducir es la actividad más riesgosa que muchas personas realizan diariamente y las chances de que tenga que pasar por un choque alguna vez existen. De hecho, se estima que en promedio una persona sufre un accidente automovilístico una vez cada casi 18 años (enlace en inglés).
A continuación, encontrará los pasos básicos (enlace en inglés) que no debe olvidar si sufrió un choque.
Buscar atención médica
Suena básico, ¿verdad? Sin embargo, muchas personas pasan de esto por los altos costos de la atención médica en Estados Unidos, por no sentir dolor en el momento y creer que eso es igual a no tener dolor, por tener una cobertura de salud con alto deducible, o simplemente por no tener tiempo.
Además de ser primordial para tratar lesiones existentes que usted puede no detectar pero un profesional de la salud sí, contar con un reporte médico puede también servir como importante evidencia (enlace en inglés) a la hora de realizar un reclamo por daños y perjuicios. Otro punto importante, no abandone el tratamiento que su médico le indique.
Recolectar información y evidencia
Existen diferentes formas de juntar pruebas que respalden su reclamo si lo chocaron:
- Testigos: Apunte sus nombres y datos de contacto y pregúnteles que vieron. Indague también si presenciaron otros accidentes en ese lugar.
- Fotografías: De ser posible, tome fotos de la escena del accidente. Esto ayuda a determinar la extensión del daño al carro y contrastar el antes y después del vehículo.
- Reporte policial: Si la policía acudió a la escena por existir considerables daños o lesiones, pida que se expida un reporte policial. Solicite también los nombres y números de identificación de los agentes policiales.
Considere qué información compartir y a quién
Las únicas personas con las que debe hablar después del accidente son su compañía de seguro, su abogado y la policía. De ninguna manera comparta información con representantes de la compañía aseguradora del otro conductor. Además, sospeche de cualquier oferta que la aseguradora le haga sin consultar con su abogado. Muchas veces las primeras ofertas son bajas y no cubren la totalidad de las consecuencias del siniestro.
Por más terapéutico que sea hablar de cuán irresponsable el causante del accidente fue con sus amigos, desahogarse con ellos no le va a compensar por los daños sufridos. Contacte a su aseguradora para informarle del accidente, a su médico para tratar lesiones o asegurarse de no tenerlas y a un abogado que maximice sus chances de recibir una indemnización completa.